Camping Miramar, mis vacaciones

Me gusta buscar sitios encantadores para desconectar en mis vacaciones de tanto ordenador, puesto que en mi trabajo estoy todo el día en una oficina (muy bonita, por cierto) con vistas a un descampado, a mi placa del botón de youtube y al ordenador.

Suelo buscar lugares con algún encanto especial, como es en este caso el Camping Miramar o tambien llamado Glamping. ¿No habéis oído hablar de él? Es un camping precioso en Mont-Roig (lugar de inspiración de Joan Miró), en el que encontramos caravanas vintage, junto con mobil homes y caravanas, frente a una playa paradisíaca.

 Nos fuimos el jueves por la mañana, desde aquí tardamos unas 3 horitas, nos fuimos Sidney, mis dos perritas y yo. Nos montamos en el coche y emprendimos la aventura los cuatro.

La verdad es que el viaje se hizo muy ameno, puesto que habían ganas de vacaciones y buena carretera. Y llegamos pasado medio día. Ya de entrada se veía venir que íbamos a estar genial, y salió a recibirnos Mari, una recepcionista la mar de simpática que hizo que nuestras vacaciones fuesen geniales.

Y nada, después de hacer el check in, nos guió hasta nuestra mobil home,y ¡madre mía que cosa tan bonita y tan acogedora!. Era con un toque marinero que le iba que ni pintado. No le faltaba ningún detalle.

Pero eso sí, yo andaba en busca de las caravanas vintage que tanto me enamoraron y cuando di con ellas, me quedé realmente fascinada. Eran todas muy cuuquis, cada una con una temática diferente y ambientadas hasta el ultimo detalle.

Sin duda era un lugar para desconectar, parecía que estuvieses en un paraíso. Todas ellas tenían su terraza con una mesa de picnic y barbacoa, a primera línea de mar con acceso directo y lo mejor de todo (por lo menos para mi), es que aceptaban perros.

Así que los siguientes días nos los pasamos de terraceo, disfrutando de la playa, paseando entre las caravanas vintage…Realmente desconecté como nunca y mis perritas y maridin también.

Era mi primera vez en un camping, y la verdad es, que la primera vez haya sido este glamping es una verdadera pasada.

Nuestra rutina era despertarnos, ir a la playita con las perras, desayunar en el porche, leer y charlar largo y tendido en la terraza mientras mis perritas jugaban o dormían. Comer, siesta y vuelta a empezar la misma rutina que por la mañana pero eso sí, incluyendo un largo paseo por la playa. Y oye, me podría acostumbrar a una vida así, porque incluso oía el mar por la noche, cosa que nunca había experimentado y me relajaba más si podía…

¿A que te han entrado unas ganas tremendas de ir?

Por cierto la playa es inmensamente larga de arena fina y con unas calas preciosas, donde poderte pasar horas en modo lagarto tomando el solecito, la mar de bien.

La verdad es que me han pasado los días como horas, pero he desconectado como si fuesen meses, ahora vuelta a la rutina y deseando planear otra escapadita, pero esta vez un poco mas larga y pillando el chiringuito tan chulo que tienen en la temporada de verano.

Sin duda es la forma mas original que he visto de disfrutar de unas vacaciones, así que si os apetece descansar, disfrutar de la playa, la montaña (porque tienen ambos), y haceros unas fotos super chulas, no os lo podéis perder. Además el personal es lo mas.

Así que si queréis pasar unas vacaciones de cuento y trasladaros a otra época, no dudéis en ir, os enamorará tanto como a mi, os lo prometo.

Mil besos