Cheesecake de fresa

Tarta de queso con fresa sin horno

Foto de la receta de cheesecake de fresa

No hay un dulce más fácil de presentar y de hacer que una cheesecake de fresa en vasitos individuales, personalmente cuando tengo muchos invitados, prefiero servir (en la medida de lo posible), los dulces en vasitos, así cada uno coge el suyo y no tengo que preocuparme de si he cortado la tarta en tantas raciones como invitados.

Ya hice este formato de postre con los trifles de café, la cheesecake de lima e incluso un tiramisú, todos ellos en formatos individuales y la verdad es que fueron todo un éxito, además seguro que por casa tenemos un montón de copas, vasitos o cuencos superchulos para servirlos.

Hoy hacemos esta cheesecake de fresa, aprovechando que estamos en temporada, y están riquísimas. Para los que no lo sepáis las fresas tienen un sinfín de propiedades beneficiosas para nuestras salud, lo más significativo de ellas, es que tienen un alto contenido en vitamina C, así que con este dulce ya no tenéis excusa para no comer un poco de fruta.

Incluso si os animáis podéis preparar también unos trifles de fresas y arándanos, están riquísimos, y servirlos junto con esta cheesecake y que vuestros invitados puedan elegir cuál es el dulce que les apetece probar, el trifle es muy rapidito de hacer, os lo prometo.

Y para animaros a probar esta cheesecake (os voy a poner los dientes largos), solo deciros que está compuesto por un 80% de sabor afresado y el otro 20% de un sabor clásico a cheesecake fría. Además le he añadido un toque de galletas tipo digestive trituradas, por supuesto, las galletas las podéis modificar a vuestro antojo y evidentemente la cantidad también. Como sugerencia deliciosa, podéis usar esas galletas riquísimas que sirven en los cafés, las más conocidas son las Lotus

Con los ingredientes indicados, da para 6 vasitos individuales (bastante grandes) o bien para una tarta de 15 cm de diámetro, el formato lo dejo a vuestra elección, sea cual sea os quedará delicioso.

  • 350 gr. de queso crema.
  • 200 gr. de fresas.
  • 100 ml de nata para montar.
  • 75 gr. de azúcar granulado.
  • 5 ml de esencia de vainilla.
  • 3 hojas de gelatina.
  • Galletas tipo Digestive (Al gusto).

Foto de la receta de cheesecake de fresa

  1. Para empezar, limpiamos las fresas, les retiramos las hojas y las partes verdes. Las ponemos en un vaso para batir y con la ayuda de una batidora las trituramos hasta conseguir su jugo. El jugo lo colamos y reservamos.
  2. A continuación, en un mortero o picadora, trituramos un poco las galletas. Reservamos.
  3. Y ahora nos ponemos con la crema, para ello ponemos un cazo al fuego e introducimos la nata junto al azúcar y la esencia de vainilla.
  4. Mientras se calienta introducimos las hojas de gelatina en un cuenco o jarra con agua fría para que se hidraten y se ablanden.
  5. Una vez conseguido el primer hervor de la nata, apagamos el fuego y le añadimos las hojas de gelatina hidratadas y removemos con la ayuda de unas varillas hasta su completa disolución.
  6. A continuación introducimos el queso crema y con la ayuda de unas varillas manuales removemos hasta conseguir una mezcla cremosa.
  7. Una vez conseguida la mezcla cremosa, reservamos un 20% de dicha crema en algún recipiente con calor, por ejemplo al baño María para que no gelifique y al otro 80% le añadimos el jugo de fresa que habíamos reservado, removemos para que mezcle bien y hacemos un segundo hervor.
  8. Conseguido el hervor, retiramos del fuego y servimos en nuestras copas.
  9. Dichas copas las llevamos al frigorífico 10 minutos para que gelifique.
  10. Una vez haya ganado consistencia y no haya peligro de que se mezcle con la segunda capa, cogemos nuestra mezcla que habíamos reservado en un puto caliente para que no gelificase y volcamos sobre nuestras copas con la ayuda de una cucharadita, es decir, damos la vuelta a la cucharadita y la apoyamos sobre la primera capa y volcamos esta mezcla sobre la cucharadita para que no caiga toda la mezcla de forma directa sobre la primera capa. De esta forma evitaremos que genere un hoyo.
  11. Ahora tan solo lo volvemos a introducir en el frigorífico hasta que gelifique. Dependiendo del tamaño, tardará más o menos, en mi caso con 1h ha sido suficiente para enfriar las 2 capas.
  12. Por último paso antes de servir, le añadimos galleta triturada encima de la segunda capa y decoramos al gusto.
  13. ¡Et Voilà! Ya tendremos nuestras cheesecake de fresa de forma individualizada. Espero que os guste y que compartáis. ¡Besos! 😉Foto de la receta de cheesecake de fresa

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