Tarta de queso con solo 3 ingredientes

Cheesecake sin harina

Tarta de queso con solo 3 ingredientes, sí, sí, lo has leído bien.

Esta semana nos apetecía algo fresco y ligero, pero teníamos poca cosa en casa, porque nos gusta ir a comprar antes del fin de semana, así que rebuscando en la nevera encontré 3 ingredientes con los que hacer esta deliciosa tarta.

Aquí tenemos también escasez de aceites, aunque si os digo la verdad solo uso el de girasol o colza (sí, aquí lo venden y lo usan como el de girasol) para la tortilla de patata y algunos bizcochos ligeros. Pero para todo lo demás tengo mis Aoves de Bravoleum de España que son lo mejor del mundo mundial.

Además, también empieza a escasear por aquí la harina y la levadura (al más puro confinamiento) y es que aquí, aparte de la guerra, la gente hace de hámster y hace acopio de comida como si fuese el fin del mundo.

Y oye, que es verdad que se le parece mucho, porque entre el Covid-19, la guerra, el «posible» gran apagón, la «posible» guerra nuclear, los desastres naturales y lo que pueda venir… Está muy cerca lo del fin del mundo.

Pero eso de hacer acopio como si no hubiese un mañana, en casa no lo hacemos.

Hoy me paso por aquí con una espectacular tarta de queso con solo 3 ingredientes, es decir, sin harina ni aceite. Y es una maravilla de esponjosa y sabrosa.

Esta tarta se hace al baño maría y es muy importante hacerla con el calor del horno abajo, para que suba uniformemente y no se queme por arriba.

Yo no soy mucho de tartas de queso, puedo decir que solo he comido con gusto esta tarta y la tarta de queso de la Viña.

A Sidney le encantan todas, y su favorita es la New York cheesecake, y aunque yo las pruebo todas, nunca me llegan a convencer. Donde se ponga un bizcocho de vainilla superesponjoso, unas natillas de vainilla o unas torrijas, que se quite todo lo demás.

Pero como en el blog tengo que hacer un variadito de todo, pues aquí os dejo esta maravilla.

Un beso enorme

mi recomendación para esta receta

5/5

Así conseguirás bizcochos y tartas perfectas

Gracias a la óptima conducción del calor, el molde redondo de Masterclass garantiza bizcochos perfectamente horneados y húmedos, ¡Hiper recomendado!

  • 250 g. de queso tipo Philadelphia
  • 180 ml. de leche condensada
  • 4 huevos M
  • 1 vaina de vainilla o pasta de vainilla (Opcional)
  • 1/4 cdta de cremor tártaro (opcional)

  1. Vamos a empezar a preparar esta deliciosa tarta de queso con solo 3 ingredientes.
  2. Para ello vamos a empezar separando las claras de las yemas.
  3. Por un lado, batimos las claras de huevo hasta conseguir un merengue denso. Si tenemos cremor tártaro lo añadiremos antes de batir. Esto nos ayudará a estabilizar las claras y que nos monten mejor. Pero si no tenemos, podemos omitirlo sin problema.
  4. Cuando tengamos las claras montadas, las reservamos.
  5. Por otro lado, vamos a batir las yemas junto con el queso crema y si queremos añadir vainilla, la añadiremos ahora también. Batimos hasta conseguir una crema uniforme y sin grumos.
  6. Seguidamente, añadirlo la leche condensada y batimos hasta que se integre.
  7. Ahora, como último paso, vamos a ir añadiendo el merengue a la mezcla de yemas y moveremos muy poco a poco y con movimientos envolventes hasta que el merengue se haya integrado y no queden grumos. Este paso debemos hacerlo muy lentamente porque de ello dependerá la esponjosidad de nuestra tarta de queso.
  8. Ahora cogemos un molde en el que no entre agua y ponemos una base de papel de hornear para que nos sea más fácil de desmoldar. El molde que yo he usado es de 10 cm y me ha quedado bastante alta, pero también podéis usar un molde de 18 y os quedara un poco más bajita.
  9. Ponemos el molde en una fuente y le añadimos agua hirviendo hasta un poco más de la mitad del molde y lo horneamos con calor solo abajo durante 35-40 minutos, según el tamaño del molde a 180 °C.
  10. Transcurrido el tiempo de horneado, apagamos el horno y lo entreabrimos un poco para que no haya un cambio brusco de temperatura.
  11. A los 10 minutos, sacamos el molde del horno y lo dejamos enfriar. La tarta habrá bajado, pero no os preocupéis de que es totalmente normal. Por eso yo la he hecho en un molde un poco más pequeño, para que me quedara más alta.
  12. Y cuando esté fría la dejamos en el molde en la nevera toda la noche.
  13. Al día siguiente, desmoldamos la tarta y ¡A disfrutar!

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