Hace unos años, cuando era joven (Que mal suena, ÂĄpor Dios!), me comĂa unos palmerones recubiertos de chocolate que vendĂan en las grandes superficies como si de pipas se tratasen, lo mejor de todo era que no engordaba ni un gramo. Pero llegĂł un dĂa que me dio por mirar atrĂĄs los ingredientes y ÂĄZas! Pura comida basura llena de aditivos y estabilizantes ademĂĄs de aceite de palma. «¥Nunca mĂĄs!», dije, y me empeñé en encontrar una receta de palmeritas de hojaldre caseras como las que os traigo hoy. Evidentemente las encontrĂ© y desde entonces el sentimiento de culpabilidad cada vez que las ingiero ha disminuido bastante.
Eso si, desde que preparo estas palmeritas de hojaldre nunca mĂĄs he echado de menos los palmerones recubiertos de chocolate (Aunque algĂșn dĂa he pecado y los he vuelto a comprar, pero que quede entre tĂș y yo…). AdemĂĄs es una receta fĂĄcil, rĂĄpida y econĂłmica y que en caso de tener invitados podemos ofrecerles un dulce casero que estĂĄ delicioso. RecomendaciĂłn: En caso de tener invitados hacer el doble de lo que pensĂĄis, ÂĄgustan tanto que se volatilizan!
Yo recomiendo que hagåis vuestra propia masa de hojaldre si lo que buscåis es sabor y textura, pero reconozco que hacer esa masa es «un coñazo» y algo realmente complicado, sobre todo el momento de hojaldrar la masa.
Y como siempre recomiendo que indaguĂ©is y encontrĂ©is la versiĂłn que mĂĄs os gusta, en mi caso Ășnicamente les pongo azĂșcar blanco, pero podĂ©is poner canela, o cacao, e incluso una vez horneadas y frĂas podĂ©is bañarlas en chocolate tanto negro como blanco. Si os animĂĄis a hacer alguna de estas recetas serĂa estupendo que las compartieses etiquetĂĄndome en mi Instagram e incluso que comentaseis este post para aportar ideas e incluso algĂșn truquito que nos pueda servir a todos.
