Esta tarta de queso sin horno es el postre perfecto para quienes buscan algo rápido, fácil y con un resultado espectacular. Con una textura cremosa y un sabor equilibrado entre el dulce de la leche condensada y el toque cítrico del limón, es ideal para cualquier ocasión.
En solo 30 minutos de preparación (más el tiempo de enfriado), tendrás una cheesecake casera que gustará a todos. No necesitas horno, ni técnicas complicadas, solo ingredientes básicos y unas ganas tremendas de disfrutar de un buen postre.
Puedes servirla con el topping que más te guste: mermelada de frambuesa, frutos rojos frescos, caramelo salado o chocolate fundido. Y lo mejor, puedes prepararla con antelación para que esté perfecta en el momento de servir.
Aunque tengo que reconocer que antes de empezar a trabajar, me gusta irme a dar un paseíto corto por la playa, y es que en esta temporada hay muchos caballos de alta competición por la playa y disfruto mucho viéndolos correr y bañarse en el mar.
Es una receta de media hora, con eso os lo digo todo, así que si eres de las mías, más productitivad que con esta tarta no vas a encontrar. De hecho, la hice en el ratito que mi chico se fue a correr, para darle una sorpresita.
🎁 ¡Llévate un ebook gratis!
Suscríbete a mi newsletter y recibe 15 recetas de galletas caseras directas a tu bandeja.
👉 Sí, quiero mi ebook gratis¿Te ha gustado esta receta tanto como a mí hacerla?
Dale tu toque de amor con una puntuación ⭐️
Nota media de los más golosos 0 / 5. Recuento de votos: 0
Aún sin puntuar… ¿te animas a ser la primera?
¡Siento que este contenido no te haya sido útil!
¡Déjame mejorar este contenido!
¿Algo que mejorar en esta receta?
🧀 ¿Te pierden las tartas de queso tanto como a nosotras?
Más tartas de queso irresistibles