Con ese color tan apetecible y un sabor más dulce que otras mermeladas, la mermelada de albaricoque es una de las más reconocidas del mundo.
Se utiliza desde hace muchísimos años en postres y dulces tan conocidos como la tarta Sacher. Con esta receta os muestro que en muchas ocasiones, lo que aparentemente es complicado, resulta sencillísimo.
Elaborando mermeladas caseras, evitaremos procesos industriales tan dañinos para nuestro organismo y ahorraremos un buen pellizco si somos muy aficionados a su consumo.
Para elegir unos buenos albaricoques para la mermelada tenemos que tener en cuenta unos pequeños tips, muy fáciles de recordar:
La mejor forma de saber si un albaricoque es fresco, es olerlo. Cuanto menos aroma tiene, mas tiempo lleva recolectado, por lo tanto menos fresco es y menos sabor tendrá
- Cogeremos siempre los albaricoques que al hacer un poco de presión, estén blanditos. Ya que el albaricoque es un fruto que necesita madurar en el árbol, si no en nuestras casas no madurará, se pochará directamente.
- En casa, no guardaremos los albaricoques en la nevera a no ser que estén muy muy maduros, ya que el frío no les va bien, y pierden el sabor y se arrugan.
- Compraremos la cantidad necesaria, ya que es un fruto muy delicado y para apreciarlo debemos consumirlo al poco tiempo de cosecharlo
- El albaricoque ideal es el de color amarillento con una parte rojiza, como si se hubiese ruborizado y una piel lisa y suave.
- Si tiene tonalidades rosa, será que tiene un exceso de azúcar y aunque nos parezca una buena opción, la verdad es que arruinará su delicado sabor.
Cuando compremos albaricoques, nos aseguraremos de que no están golpeados ni deteriorados, ya que sino el albaricoque se marchitará muy rapido
Con estos pequeños tips a tener en cuenta, ya podemos ponernos a preparar una deliciosa mermelada de albaricoque caserita.
Para conservar la mermelada de albaricoque casera, tan solo necesitaremos esterilizar los botes donde haremos la conserva y que lo sellemos con el mismo vapor de la mermelada caliente, es decir, cogemos el bote esterilizado, introducimos la mermelada templada, tapamos y le damos la vuelta al bote utilizando la tapa como pie. Lo dejaremos durante 24 h y de esta forma habrá quedado hermético.
¿Te ha gustado esta receta tanto como a mí hacerla?
Dale tu toque de amor con una puntuación ⭐️
Nota media de los más golosos 0 / 5. Recuento de votos: 0
Aún sin puntuar… ¿te animas a ser la primera?
¡Siento que este contenido no te haya sido útil!
¡Déjame mejorar este contenido!
¿Algo que mejorar en esta receta?
🎁 ¡Llévate un ebook gratis!
Suscríbete a mi newsletter y recibe 15 recetas de galletas caseras directas a tu bandeja.
👉 Sí, quiero mi ebook gratis