Un ejemplo más de la polivalencia de las fresas son estas natillas de fresa caseras, si además las acompañamos con un poco de chocolate el resultado se vuelve delicioso. He de reconocer que cuando me surgió la idea era un poco escéptica porque es muy complicado sacarme de las natillas de vainilla, bueno miento, si me pones unas natillas de chocolate me haces dudar y creo que acabo eligiendo según en la época del año en la que nos encontremos. Además, lo mejor de las natillas es lo fáciles que son de hacer y el gran resultado que se consigue, porque conozco pocos postres que con tan poco tiempo de elaboración consigan tantos admiradores, de hecho me ha ocurrido infinidad de veces en las que he tenido que escoger entre un postre muy elaborado y unas natillas y he acabado eligiendo las natillas.
Recordar la importancia de elegir una buena materia prima, sobre todo cuando es el sabor principal, en este caso os recomiendo echéis un vistazo a la receta de almíbar de fresas donde hago un listado de tips a tener en cuenta a la hora de comprar las fresas adecuadas porque es vital que la fresa tenga el aroma y sabor adecuado para conseguir un postre delicioso.
Evidentemente el chocolate que coloco encima de las natillas de fresa es totalmente opcional, también puedo recomendaros la nata montada, de esa forma simularéis, salvando las distancias, el típico sabor de fresas con nata, o porque no, los 2, tanto la nata como el chocolate quedan genial con estas natillas de fresa.
Por cierto, si preparas algún postre publicado en este blog no dudes en etiquetarme en mi Instagram, ¡Los veo todos!
Y ahora sí, vamos a ponernos con esta receta facilísima de natillas de fresa, cualquier duda comentarla y os daré soporte lo antes posible.
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